Desde hacía tiempo, los astrofísicos tenían un problema con Saturno y uno de sus satélites, Jápeto.
Jápeto, desde la sonda Cassini.
Como puede apreciarse, este satélite tiene una cara "manchada" o más oscura, llamada Cassini Regio. Se creía que este oscurecimiento se debe a la colisión de partículas contra esa cara durante millones de años, así que en mayo de este año se orientó el telescopio espacial Spitzer hacia allí para ver lo que pasaba. Y...¡sorpresa!
Concepción artística de lo recogido por el telescopio espacial Spitzer.
La imagen superior corresponde a lo observado a partir de los datos del Spitzer: un anillo gigante de partículas de hielo y polvo, pero tan frío (unos -190 ºC) y poco denso que es invisible a simple vista. Por eso no fue visto hasta que se utilizó un telescopio de infrarrojos.
Este anillo no se parece en nada al resto de anillos de Saturno conocidos hasta ahora: mientras que los que tenemos en mente abarcan unos 275.000 km y tienen una anchura de tan sólo unos 1000 km como mucho, éste empieza a seis millones de kilómetros de Saturno y se extiende a lo largo de otros doce millones de kilómetros más con una anchura de 2,5 millones de kilómetros (unas veinte veces el diámetro del planeta). Es decir, si pudiésemos observarlo, ocuparía lo mismo que dos lunas, una a cada lado de Saturno. De hecho, para rellenar el espacio que ocupa necesitaríamos aproximadamente 1000 millones de Tierras. Una auténtica monstruosidad.
Además, hay que destacar que el nuevo anillo está inclinado 27º con respecto a los ya conocidos anteriormente, y aquí viene lo más interesante de la noticia. 27º es justo la inclinación de el satélite Febe (otro satélite de Saturno, que además gira al contrario que los demás).
Febe, desde la sonda Cassini.
Como podéis observar, Febe no se asemeja en nada a satélites como la Luna, sino que parece más bien un asteroide. Las teorías apuntan a que es precisamente eso: un asteroide que fue capturado por la gravedad de Saturno. Al parecer, el nuevo anillo se ha formado a partir del material que Febe ha ido perdiendo a lo largo de su órbita. Así que, cada vez que Jápeto pasa cerca del anillo que ha creado Febe, se le van "pegando" las partículas de dicho anillo (como insectos en el parabrisas de un coche), lo que explica el problema de su cara Cassini Regio.
Comparación del tamaño de Saturno con el anillo descubierto.
¿Quién dijo que todos los grandes descubrimientos ya están hechos?
Todas las fotografías han sido tomadas por NASA.
Para leer más:
- Noticia publicada en la página de la NASA (en inglés)
- Noticia en la página del telescopio espacial Spitzer (en inglés)
- Noticia en el diario elmundo.es (en español)
Todas las fotografías han sido tomadas por NASA.
Para leer más:
- Noticia publicada en la página de la NASA (en inglés)
- Noticia en la página del telescopio espacial Spitzer (en inglés)
- Noticia en el diario elmundo.es (en español)
3 comentarios:
Es curioso como se han dado hipotesis tan complicadas para justificar esta apariencia, cuando el motivo real a resultado ser mas sencillo.
Bienvenido Íñigo.
Tienes toda la razón del mundo. A mí lo que más me sorprende es que semejante "monstruosidad" no se haya descubierto antes...¡A saber que tendrán otros planetas alrededor!
Qué pasada, y qué bonito.
Si es que está claro que cuanto más sabemos, menos sabemos..
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